Interesante post del blog de Cotizalia “Desde Londres” de J. Jacks: Keynes nunca fue keynesiano.
Más bien lo que viene a decir el post es que Keynes nunca fue lo que muchos entienden por ser un “keynesiano”.
Destaco los dos últimos párrafos del post:
«Algunas ideas de Keynes, no lo que algunos dicen que dijo, están vigentes. Keynes nos recuerda que las políticas “ortodoxas” de reducir el gasto público o reformar el mercado laboral sin actuar sobre las verdaderas causas de las crisis no solucionan nada. Keynes nos recuerda que los ciudadanos tienen el poder para decidir su futuro, no el “mercado”. Keynes nos recuerda que el papel fundamental en la economía es el de los empresarios y que el Gobierno sólo debe intervenir en casos puntuales.
Estamos cerca de las vacaciones. Vendría bien a algunos analistas económicos y políticos que leyeran primero a Keynes para comprender quién era (y qué no era) antes de calificar cualquier idiotez política como “Keynesiana”. Keynes no se lo merece.”
Si a este post unimos los dos de S. McCoy sobre el fracaso de las políticas keynesianas, fracaso que no debe llevar el apellido “keynesiano” ya que las políticas que se están ejecutando no son políticas keynesianas, nos van dando una idea de que una importante intervención del Gobierno en épocas de crisis es necesaria pero si es puntual y siempre y cuando no se limite a reducir el gasto público, subir impuestos, o reformar el mercado laboral desde una perspectiva pública.